Elegir cambiar de actitud
Es una cuestión de actitud y de elección personal, seleccionar que postura adoptamos ante lo que queremos transmitir.
Así estamos ante una multitud que nos observa y solo ve en nosotros aquello que elegimos comunicar.
Quién dice que no podemos intentar pararnos frente a ellos con una entereza que produzca mucho más que aquella imagen de persona abatida, que no cree en sí misma?
Esta en uno modificar aquellas posturas corporales que no nos ayudan a lo largo de la vida y que desde ya, nos ayudarán a mucho más si queremos que “el otro” compre nuestro discurso.
Ahora bien, puedes proponerte comenzar, este puede ser tu momento de elección y debes enfrentarlo, tu actitud está comunicando y es ahí hacia donde debes apuntar.
Solo imaginate, visualízate frente a un auditorio, y entiende que para llegar a cada uno de quienes te están observando, será mejor que quieras empezar por ser tu propio admirador.
Culpables vs. Soluciones
Dentro de las empresas, nos encontramos con aquellos seres que adoran encontrar culpables. Ellos gastan sus energías en desarrollar la condena y comunicarlo a través de las redes a cuantas personas puedan dentro de la organización.
Nos gustaría que entendieran que están mal gastando su precioso tiempo, que se puede lograr mucho si se proponen hacerlo.
Tampoco estamos generalizando…
“Conocemos algunas personas en tu empresa. Son buena onda en línea. ¿Tienes más de esos escondidos por ahí? ¿Pueden salir a jugar?”
A ellos es a quienes estamos esperando. Creemos que podemos lograrlo, que buscando soluciones y no reparando en el culpable del error, podremos emprender una comunicación más efectiva como así también pasarla mejor en nuestra “casa” laboral ya que es allí donde permanecemos por muchas horas.
Dejen de preocuparse para no ocuparse, tomen las riendas, despierten de una vez y vayan por más.
Es una cuestión de actitud y de elección personal, seleccionar que postura adoptamos ante lo que queremos transmitir.
Así estamos ante una multitud que nos observa y solo ve en nosotros aquello que elegimos comunicar.
Quién dice que no podemos intentar pararnos frente a ellos con una entereza que produzca mucho más que aquella imagen de persona abatida, que no cree en sí misma?
Esta en uno modificar aquellas posturas corporales que no nos ayudan a lo largo de la vida y que desde ya, nos ayudarán a mucho más si queremos que “el otro” compre nuestro discurso.
Ahora bien, puedes proponerte comenzar, este puede ser tu momento de elección y debes enfrentarlo, tu actitud está comunicando y es ahí hacia donde debes apuntar.
Solo imaginate, visualízate frente a un auditorio, y entiende que para llegar a cada uno de quienes te están observando, será mejor que quieras empezar por ser tu propio admirador.
Culpables vs. Soluciones
Dentro de las empresas, nos encontramos con aquellos seres que adoran encontrar culpables. Ellos gastan sus energías en desarrollar la condena y comunicarlo a través de las redes a cuantas personas puedan dentro de la organización.
Nos gustaría que entendieran que están mal gastando su precioso tiempo, que se puede lograr mucho si se proponen hacerlo.
Tampoco estamos generalizando…
“Conocemos algunas personas en tu empresa. Son buena onda en línea. ¿Tienes más de esos escondidos por ahí? ¿Pueden salir a jugar?”
A ellos es a quienes estamos esperando. Creemos que podemos lograrlo, que buscando soluciones y no reparando en el culpable del error, podremos emprender una comunicación más efectiva como así también pasarla mejor en nuestra “casa” laboral ya que es allí donde permanecemos por muchas horas.
Dejen de preocuparse para no ocuparse, tomen las riendas, despierten de una vez y vayan por más.
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